domingo, 16 de febrero de 2014

LESIONES MAS COMUNES EN EL FUTBOL Y SU TRATAMIENTO

Durante un partido de fútbol, existen contactos y sobresfuerzos que ponen en peligro la integridad física de los futbolistas. Esto hace que a lo largo de una temporada los jugadores sufran diversas lesiones las cuales deben afrontar. Es muy importante saber cuales son las que más se producen y porque, así como un tratamiento para su recuperación y prevenció.



Lesiones en huesos:

Fractura de los huesos de la nariz: consiste en la ruptura de los huesos propios de la nariz. Esta lesión suele producirse en impactos contra adversarios, compañeros y el propio balón. (1 mes de recuperación)

Fractura de tibia y peroné: fractura muy dolorosa y a la vez aparatosa. Suele producirse en fuertes encontronazos tras una entrada con un adversario. En algunas ocasiones tan sólo se rompe uno de los dos huesos pero si la entrada es fuerte lo más probable es que ocurra la doble fractura. Se necesita un largo tiempo de reposo.

Rotura de meniscos de la rodilla: cualquiera de los dos meniscos es propenso a romperse. Es una fractura que se produce tras un encontronazo brusco con un adversario. (3 meses de recuperación)

Rotura de los ligamentos de la rodilla: esta lesión a parte de producirse por un encontronazo con un adversario, también es muy común cuando se realiza un giro brusco y en mala posición de la rodilla. Por lo que es muy común ver como un jugador el sólo se rompa los ligamentos de la rodilla.

Rotura de las falanges del pie: la peculiaridad que guarda este tipo de lesión se debe a que en la mayoría de los casos esta lesión se produce involuntariamente, tanto que ni el que se lesiona como el que lesiona se suelen dar cuenta hasta que después del partido se enfrían.

Rotura de los ligamentos del tobillo: rotura muy dolora producida por lances del juego. Generalmente el período de recuperación es muy largo. Se necesita un tratamiento de ejercicios de recuperación después de un reposo considerable.


Lesiones en musculares:

Rotura de fibras en el cuadriceps: si es más frecuente y los músculos más propensos a la ruptura de fibras son: isquio-tibial, recto femoral, semi-membranoso, semi-tendinoso, etc…

Hablar de las lesiones musculares es ponerse y no parar ya que dentro de estos dos grandes grupos podemos encontrar miles de lesiones de menor a mayor escala.

Las lesiones musculares son el día a día del deportista que no sigue un buen plan de entrenamiento.

Lesionen en tendones:

Tendinitis: se trata de la inflamación de un tendón, con el consiguiente engrosamiento del mismo ocasionado por múltiples causas.

Tenosinovitis: Consiste en la reactivación inflamatoria de las vainas sinoviales que recubren o envuelven el tendón.

Las lesiones más frecuentes son tendinitis tanto en el tendón rotuliano de la rodilla como en el tendón de aquiles que en algunos casos aún siendo el más fuerte y grueso del cuerpo se rompe.

Otro tipo de lesiones:

Últimamente estamos viendo que en el fútbol se están produciendo una serie de muertes y sustos considerables por parte de los jugadores. Esto es debido al gran trabajo que realiza el cuerpo que a veces llega a su límite sin avisar. Entre estas lesiones generales podemos hablar por una parte de la lipotimia, síncope, colapso, infarto de miocardio o tromboflebitis.

Tratamiento de lesiones musculares:

La compresión de la lesión: Interrupción de la actividad deportiva, descarga y terapia inmediata. La compresión debe ser aplicada de forma intensiva los primeros 20 minutos y después se aflojará ligeramente para las horas siguientes. En todos los casos deberá durar varios días. Su importancia radica en que limita la importancia del edema y del hematoma, y atenúa por tanto la desorganización y la retracción de las fibras.

La crioterapia o Hielo: Con bolsa de frío sobre el terreno.

Prescripción de medicamentos resolutivos, flebotónicos y vasculoprotectores que favorecen una regeneración muscular de calidad.

Descarga mediante muletas según la gravedad y se aconseja alzar durante la noche el miembro afectado durante los 2 ó 3 primeros días.

Posteriormente el jugador deberá acudir al medico para el diagnostico de su lesión, y empezar son su rehabilitación.